Mordedura de Perro/Ataque de Animal

California tiene leyes de “responsabilidad estricta” para mordeduras de perro, lo que hace que los dueños de mascotas sean responsables de la mayoría de las lesiones por mordedura, independientemente del historial del animal o de las precauciones del dueño. Según la ley de California, los dueños de perros pueden ser considerados responsables si su perro muerde a alguien que se encuentra en un lugar público o que esté legalmente en un lugar privado, incluso si el perro no tiene antecedentes de agresión. Esta responsabilidad aplica incluso si la mordedura no rompe la piel. Sin embargo, existen excepciones para los perros de policía o militares en servicio, o si la víctima estaba provocando al animal. California tiene un plazo de dos años para presentar reclamaciones de este tipo.

Las lesiones por mordeduras de perro pueden variar desde cortes menores hasta laceraciones severas y heridas punzantes profundas. Las lesiones comunes incluyen cicatrices faciales, daño a los nervios, lesiones oculares, infecciones (incluyendo la rabia), huesos rotos y trauma psicológico. Las víctimas a menudo requieren atención médica inmediata debido al riesgo de infección por bacterias o enfermedades transmitidas por el perro. El costo del tratamiento de emergencia y la posible rehabilitación a largo plazo puede ser considerable. Las causas de los ataques de perros a menudo provienen de una tenencia irresponsable, incluyendo falta de cuidado adecuado, negligencia médica, abuso o maltrato. Los dueños descuidados pueden perder el control de sus mascotas, lo que lleva a interacciones peligrosas con el público.